La medida, que entrará en vigor mañana 12 de abril, ha sido confirmada por el Comité de Aranceles Aduaneros del Consejo de Estado en un comunicado oficial, en el que condena la política comercial estadounidense por «violar gravemente las normas del comercio internacional» y de aplicar «una política unilateral de acoso y coerción».
«Estados Unidos ha ignorado el orden económico global que ayudó a construir tras la Segunda Guerra Mundial», indica el texto, que añade que China «condena enérgicamente» las últimas medidas y que su paciencia tiene límites.
Los aranceles dejan sin mercado real a productos de EEUU
Pese a la dureza del tono, Pekín precisó que los aranceles ya han dejado sin mercado real a los productos de EE. UU. en China, por lo que cualquier aumento adicional carecerá de sentido económico, será «irrelevante» y «acabará convertido en una burla en la historia de la economía mundial», según el comunicado.

Esta medida llega dos días después de que Pekín elevara del 34 % al 84 % los aranceles a los bienes estadounidenses, en represalia al gravamen del 50 % que Trump impuso previamente a los productos chinos.
Según Lin, las contramedidas de Pekín «no solo protegen sus propios intereses legítimos, sino que también salvaguardan el orden internacional y los derechos de todos los países afectados por el unilateralismo estadounidense».
China ya ha advertido de que no permitirá que se le impongan condiciones desiguales en futuras negociaciones, y que cualquier diálogo «debe basarse en la igualdad y el respeto mutuo».